miércoles, 27 de agosto de 2014

Hasta la victoria siempre, pueblo dominicano!

Por ATEODOM / Asociación de Ateos Dominicanos

ATEODOM  felicita al pueblo dominicano por su victoria, consumada con la aprobación, en el Congreso de la República, del proyecto de ley que declara loma Miranda parque nacional.

Los ateos y las ateas dominicanos/as, queremos expresar nuestra admiración y respeto por todas las personas que hicieron cuanto estuvo a su alcance para emplazar a los Poderes del Estado a actuar a favor del bienestar de la patria, y no a favor de una empresa extranjera, que pretendía, no solo privarnos de nuestros recursos mineros, sino también, atentar contra lo que es el escudo natural que hace posible que disfrutemos de un clima tan alegre como el que nos posibilita la Cordillera Central.

ATEODOM / Asociación de Ateos Dominicanos, felicita especialmente al padre Rogelio Cruz, un hombre del catolicismo, que lleva en su actitud, toda la luz que pueda tener una Iglesia tan ultrajada por indeseables  como el Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez.

Gracias a los medios de comunicación que desde sus respectivos editoriales nunca  claudicaron en su reclamo para salvar loma Miranda. Entre tales medios están: www.ciudadoriental.com, www.acento.com.do, la emisora de radio FM "La Z101", con su programa "El Gobierno de la Mañana", tribuna desde la cual, su principal personaje, el intelectual dominicano, Álvaro Arvelo hijo, mantuvo un discurso contestatario contra los todopoderosos, nacionales e internacionales, que se frotaban las manos a la espera de que triunfara el mal.

El pueblo dominicano está despertando. Conquistas como la preservación de "Los Haitises" cuando se cernía en sus dominios la amenaza de la cementera; la inclusión en el Presupuesto Nacional vigente, de los dineros equivalentes al 4% del PIB destinado por ley para Educación pública, y ahora loma Miranda parque nacional, son una señal inconfundible de que como pueblo estamos exhibiendo un nivel de conciencia que habrá de conducirnos a mediano plazo, a una mejor nación.

Que viva República Dominicana!

domingo, 24 de agosto de 2014

La percepción sugiere que el pueblo dominicano es ignorante e indolente, o que está resignado a convivir con quienes lo golpean

Orbis Beltré
Por Orbis Beltré – Relacionista público de ATEODOM / Asociación de Ateos Dominicanos

El párrafo que sigue es parte de una conversación que tuve hoy con un amigo de la red Facebook, y a quien en mi contesta llamaré "Dominicano Exterior".

-"Hola, Orbis, quiero hablar algo contigo referente a nuestra nación. Lo he pensado mucho, he tratado de esquivarlo, olvidar e ignorar lo que siento. Orbis, tengo una pregunta: ¿Qué tanto amas nuestra nación? Llevo 31 años fuera de Quisqueya, y siento a veces que quiero reventar por la tanta corrupción que hay en nuestra nación. En en 2011 empecé un movimiento social en New York, y la gente a mi alrededor me decepcionaron".

Dominicano Exterior, esta tierra la amo como a mi familia, como a mi mismo. Aquí es el único lugar del mundo donde no soy extranjero o "nacionalizado". 

La nuestra es una sociedad con demasiada capacidad como para decepcionar al más optimista, es un asunto que tiene que ver con CONCIENCIA, una herramienta poco acariciada, y lo peor, acariciada por poca gente. 

Juan Pablo Duarte, habiendo muerto en Venezuela, tan pobre que indigna saberlo, es el mejor referente de cómo hemos sido como pueblo, una realidad que todavía persiste. 

Basta leer la Carta Pastoral del 24 de julio de 1844, que hoy aparece publicada en el libro "La Historia al Revés", del intelectual dominicano Guido Riggio Pou, para darnos cuenta de cómo la Iglesia católica "asesinó" a Duarte, y hoy sin embargo, esa misma Iglesia, sin siquiera haber pedido perdón, se exhibe como la portadora del ideario de nuestro patricio, y así lo hace creer a la gente y se repite la farsa.

Es muy común escuchar en las ciudades y campos de la República, este refrán: "Más vale un malo conocido que un bueno por conocer".

¿Hay alguna causa que pueda ser vinculada a la desidia, que respecto a amar esta tierra, nos caracteriza? 

Sí, la hay. Hemos sido un pueblo hartamente engañado por todo el que desde la fundación de la República ha tenido la oportunidad de abusarnos a través del ejercicio del poder, sin importar el poder que sea. 

Así, esto: hoy somos un pueblo incapaz de soñar, incapaz de deshacerse de esos viejos modelos de autoridad que lo torturan, porque al creer que en la política solo están los trepadores, prefiere este pueblo no arriesgarlo todo, y continuar con los mismos oportunistas y mafiosos que por más de siglo y medio lo han timado. 

De ahí que estén tan fuertemente ancladas en nuestra sociedad, asociaciones de malhechores como el Partido de la Liberación Dominicana, el Partido Revolucionario Dominicano, y el Partido Reformista Social Cristiano. 

De ahí que continúen tan vigentes como con tanta posibilidad de volver a ser jefes de la primera magistratura de la nación, delincuentes de un calibre de peligrosidad como Leonel Fernández e Hipólito Mejía. 

De ahí que mantengamos en la palestra pública, a políticos de pocilga como Amable Aristy Castro, o a políticos como esos indignos legisladores que en 2009 firmaron el contrato Barrick Gold, por medio del cual, sin ningún ruborizo, regalaban nuestro oro a una empresa extranjera.

Tal vez tú estés frustrado tras ver cómo no creyó en ti, incluso la gente de tu más íntimo entorno, cuando quisiste presentar alguna opción de hacer el poder diferente. 

Es, amigo mío, que el pueblo dominicano, equivocadamente entiende que hay peores criminales que los líderes que ha tenido, y que tales están entre aquellos ciudadanos que no comulgan con el proceder criminal de los tres partidos políticos tradicionales.

El pueblo dominicano ha sido tan meticulosa y sutilmente maltratado, que a veces causa la impresión de que es ignorante, indolente, o de que está resignado a convivir con quienes lo golpean, y que está predispuesto a desconfiar ante cualquier camino que pueda ser diferente al despeñadero por el que lo han llevado siempre.

En República Dominicana, en cada una de sus ciudades, en cada uno de sus campos, hay un museo de hombres y de mujeres vivientes, que se exhiben como cadáveres disecados. Son almas humanas que cansadas o no de luchar por quitarle de encima al pueblo, el letargo que lo condena a la miseria, no pueden esconder su tormento ante un mal que les grita "ustedes son el mal".

Es innegable cuán desilusionante es el panorama que nos presenta la sociedad dominicana en materia de conciencia ciudadana, en materia de civismo. Observar la terquedad de nuestra gente, cómo, a pesar de querer vivir, insiste en tomarse la cicuta que la envenena, y no por un asunto de honor al estilo socrático, sino por terquedad, eso es simplemente algo que desequilibra la objetividad, y que convida al más sosegado ser, a estrellar un "¡JÓDETE, PUEBLO DE MIERDA!"

Pero si hemos resuelto continuar pronunciando el gentilicio que nos ubica en un lugar específico del planeta tierra y de la Vía Láctea, un "¡JÓDETE, PUEBLO DE MIERDA!" jamás debe ser la actitud.

Hoy más que ayer, quienes deseamos un país mejor, tenemos mayores posibilidades y mejores medios de hacer posible ese deseo.

La libertad de expresión y los medios de información digital, son el arma infalible.

Debemos escribir artículos de críticas al sistema y a los líderes que sustentan el sistema; debemos escribir cuestionando el modelo económico, por ejemplo, recalcando cómo dicen los dueños de los medios de producción que crece la economía cada año, pero entonces la gente, que es el motor de dichos medios de producción, es cada vez más pobre. 

Debemos insistir escribiendo críticas a una fanfarreada democracia, que no nos garantiza servicio médico de calidad, que no nos garantiza seguridad ciudadana, que no nos garantiza un retiro digno cuando ya no podamos trabajar más, y que no nos ofrece, en sentido general, un motivo, más allá de la belleza de esta tierra, por el que podamos sentirnos dichosos de haber nacido aquí. 

Debemos impartir charlas y conferencias en nuestros campos, en las esquinas de nuestros barrios, en los parques, en las escuelas, en los liceos y los colegios; debemos impartir charlas y conferencias en las universidades... hasta lograr sacudir la sensibilidad de esa gente que no se la educó para que supiera cuándo se la oprime.

Que no claudique quien tenga que decir y/o hacer cualquier cosa contra este sistema de gobierno que azota despiadadamente la República!

viernes, 22 de agosto de 2014

ATEODOM apoya al Grupo Sacerdotal Don Hélder Cámara; Loma Miranda no se negocia!

Padre Nino Ramos
 Comunicado del Grupo Sacerdotal Don Hélder Cámara
 NOTA DE PRENSA
Atención a todos los dominicanos y dominicanas, de todos los partidos, de todas las Iglesias, de todas las organizaciones y asociaciones. Nuestro país está dirigido por:
190 diputados, 32 senadores, 22 ministros, la vicepresidenta y el Excmo. Sr. Presidente de la República, en total unas 246 personas, a lo más unas 260 personas. Pues, ese total de 260 personas que nos dirigen no pueden pisotear las voluntad de 10 millones de dominicanos y dominicanas que hemos dicho que no se puede explotar LOMA MIRANDA.
Y todos sabemos, incluso ellos, que tenemos toda la razón, porque el agua es vida y vale más que todo el oro o el ferroníquel o cualquier otro mineral que pueda haber en el subsuelo, sin estos minerales podemos vivir, pero sin agua no habría ningún tipo de vida animal, vegetal ni humana.
Algunos de estos políticos han estado queriendo jugar al cansancio con nosotros los de abajo, con los pobres, con los buenos y verdaderos dominicanos, y el último jueguito nos viene ahora de la presidenta del Senado Dra. Cristina Lizardo, quien anuncia la posposición de la reintroducción del proyecto e incluso dizque el envío a una nueva comisión.
Por esta razón reiteramos con más energía ahora nuestro llamado a HUELGA NACIONAL PARA EL PRÓXIMO 27 DE AGOSTO DESDE LAS 6:00 A.M. y por 24 horas.
Hacemos el llamado especial a todos los creyentes que residimos en este hermoso país, en nombre de Dios defendamos la naturaleza por él creada. No permitamos que un grupito de insensatos y avariciosos dañe tan hermosa naturaleza que es un don de Dios para nuestra Patria y para todas las generaciones de dominicanos que quedan por venir.
Dentro de 100 años, ninguno de los 10 millones de dominicanos ni los otros 2 millones de extranjeros que habitamos hoy, estaremos presentes en estas tierras, pero sí habrá otros diez millones de descendientes y no tendrán agua para vivir.
Hemos de dejarles a ellos unas tierras tan hermosas como la que Dios nos ha dejado a nosotros. No somos dueños de la tierra para destruirla….somos los ADMINISTRADORES para vivir dignamente de ella y con ella y prepararla para que también los que vienen detrás de nosotros vivan dignamente en este paraíso que es la República Dominicana.
Vamos, pues, el próximo 27 de agosto a mostrar pacíficamente al gobierno cuál es nuestra férrea voluntad. Y sólo es al gobierno que hemos de mostrar nuestra voluntad, no a Falcondo. Los de Falcondo son un grupito de avariciosos extranjeros que debieran marcharse ya mismo a su tierra, pues, el pueblo dominicano, los ha declarado ya “PERSONAS NO GRATA”, igual que a sus colegas de la Barrick Gold, quienes ya están destruyendo toda nuestra provincia Sánchez Ramírez, con su naturaleza, sus animales, sus aves y nuestra gente…. Y ellos que se preparen, porque nuestra lucha contra ellos no ha terminado todavía. Una vez más en nombre del único Dios en que todos creemos, paralicemos el país el 27 de agosto para mostrar al gobierno nuestra firme decisión.
GRUPO SACERDOTAL DON HÉLDER CÁMARA | Rev. Ramón Ramos (P. Nino Ramos)


miércoles, 20 de agosto de 2014

Respuesta a un cristiano cristiano (Cabiya refuta a D`Alessandro. Sigue debate sobre LGTB)

Tomado de www.acento.com.do

Por Pedro Cabiya

Citar la Biblia o blandirla para autorizar lo que se dice es una simple impertinencia, siempre. Presupone que el interlocutor reconoce la Biblia como un documento del que emana esa autorización, y eso es una burda petición de principio. Es peor cuando el tema a discutirse es precisamente la religión o la Biblia misma, porque utilizar el documento que se pone en tela de juicio para dirimir la cuestión es sencillamente un disparate. Y un disparate que tiene nombre: se llama razonamiento circular.

Querido Jesús D’Alessandro,
¡Hola! ¡Cuánto tiempo! Me alegra verte involucrado en este debate; como bien habrás podido darte cuenta, tus correligionarios lo único que logran con sus histerias es que más y más personas descarten la religión como una alternativa sensata para vivir en sociedad. Créeme: si todos los cristianos fueran como tú, otro gallo cantaría. Aun así, cristiano eres, y me permito honrar tu respuesta.
¿Es solo cuando Ortiz lo hace o en general ver citada la Biblia en un artículo te parece “una práctica sandia, impertinente y de mal gusto”? ¿O es el hecho de citarla de vuelta tú? En cualquier caso eres libre de expresarlo, solo que no introduzcas el artículo como “…respuesta que busca esclarecer el debate…”
Citar la Biblia o blandirla para autorizar lo que se dice es una simple impertinencia, siempre. Presupone que el interlocutor reconoce la Biblia como un documento del que emana esa autorización, y eso es una burda petición de principio. Es peor cuando el tema a discutirse es precisamente la religión o la Biblia misma, porque utilizar el documento que se pone en tela de juicio para dirimir la cuestión es sencillamente un disparate. Y un disparate que tiene nombre: se llama razonamiento circular. Ejemplo:
Alberto:“Dios existe.”
Pedro:“¿Cómo lo sabes?”
Alberto:“Porque la Biblia lo dice.”
Pedro:“¿Y por qué debo creerle a la Biblia?”
Alberto:“Porque la Biblia fue escrita por Dios.”
¿Te parecería o no una estupidez que yo empezara ahora mismo a respaldar mis palabras con citas de Harry Potter? ¿Qué me dirías? Rehusarías, sin duda, aceptar mis citas como válidas para el argumento, y te importaría muy poco que Harry Potter fuera para mí la fuente de toda sabiduría. Sospecho que me ridiculizarías, y estarías en tu derecho, puesto que sería ridículo. De todas formas, y como sé que Ortiz sí considera la Biblia un documento autorizado, se la cité de vuelta. En un debate racional, las ideas deben bastarse a sí mismas y ser juzgadas por su consistencia interna.
Inicialmente veo que señalas el Cristianismo, o sea, el Nuevo Testamento, como algo mágico, contrario a la razón y al desarrollo, ¿esto significa que conoces el Nuevo Testamento, su contexto y sus efectos en las sociedades, y que tu conclusión es precisamente esa?
Aunque este es un argumentoad hominemque busca descalificarme, te satisfaré. Crecí en un hogar católico ortodoxo, criado por una madre catequista de capa y espada que, además de farmacéutica, hizo estudios de teología. Mi primera lectura fue la Biblia. Y mi segunda. Y mi tercera. Estudié en colegios católicos. Obtuve mi maestría en literatura medieval europea, lo cual significó estudiar a fondo la patrística. Justino Mártir, San Agustín, Eusebio, Orígenes, Santo Tomás, Celso… estos eran los libros de mi mesita de noche. Aparte de esto, no te soy extraño, de modo que me conoces como un lector perspicaz y maestro hábil. No sostengo lo que sostengo por ignorancia del tema, al contrario: sostengo lo que sostengo a raíz de lo que sé sobre el tema. ¿Que podría estar equivocado? Claro que sí: demuéstrame con buenos argumentos y evidencia en qué y cómo, y sopesaré como responderte.
Los cristianos seguimos las enseñanzas de una persona ubicable académicamente en el tiempo y el espacio que, juzgando por la dimensión incomparablemente liberadora de su filosofía, es consecuentemente incomparable.
Sabes perfectamente bien que Jesús no es ubicable ni en el espacio ni en el tiempo, y que ese es uno de los grandes problemas de la historiografía cristiana. No existe ni una sola referencia contemporánea a Jesús, ni a los eventos mágicos y extraordinarios narrados en los evangelios (que, dicho sea de paso, se contradicen mutuamente)… excepto por un párrafo de Flavio Josefo, demostradamente falsificado por Eusebio. Más importante aún, recibimos de la antigüedad solo aquello que no quemó o no logró quemar el increíblemente poderoso aparato totalitario de la Iglesia, empeñada en cuadrar su dogma; así pues, sabemos muy poco de los detractores y críticos tempranos del cristianismo. Lo siento, Jesús, pero el Jesús de los evangelios no aparece en ninguna referencia independiente, y no podría ser de otra manera, porque se trata de un personaje mítico, literario, alegórico, que ciertas sectas gnósticas de judíos helenizados, probablemente de Alejandría, y de inclinación literalista, erróneamente interpretaron como histórico. La bibliografía está ahí… pero el problema con los creyentes adoctrinados es que no sacan el hocico de la Biblia ni de las páginas de los apologistas. Viven en el cerrado mundo de los que creen lo que creen porque creen. Yo consumí esa literatura también,claro, pero la redondeé con lo que tenían que decir otros estudiosos, no comprometidosa prioricon una ideología. ¿Puedes tú decir lo mismo? Atrévete a salir del cómodo mundo de la apología, termina de leer lo que hay allá afuera, y entonces discutamos este punto.
Está muy de moda decir que el Cristianismo es de la Edad de Bronce,¿por qué dices esto tú también? Solo el contenido del Pentateuco y Job (solo 6 libros del Antiguo Testamento, que además son escrituras del Judaísmo) pertenecen a ese período. A parte de lo errada que es esta datación, algunas personas usan este concepto para hacer alusión a lo viejo que es el Cristianismo, razón por la cual “no debe ser tenido en cuenta.”
Nunca dije que los evangelios fueran de la edad del bronce. De hecho, en ningún momento me refiero a los evangelios. Estoy consciente de que solo el Pentateuco data de esa época, precisamente los cinco libros de los cuales emana la exhortación contra la homosexualidad que tanto les gusta citar a los evangélicos y el verdadero tema de mi ensayo. Ciertamente, los hombres y mujeres modernos no podemos regirnos por preceptos que datan de una edad superada. Hoy sabemos, por ejemplo, que es moralmente reprehensible asesinar a los hijos desobedientes, como manda Deuteronomio. Hoy sabemos que no es correcto esclavizar a otros seres humanos, como dice Éxodo… Y que es prácticamente imposible obedecer Levítico cuando prohíbe el uso de indumentarias que mezclan diferentes tejidos. Si hoy día alguna persona viviera a pie juntilla lo que prescribe el Pentateuco, acabaría en la cárcel, pues tendríamos que separarlo de la sociedad y protegernos de él.  Lamentablemente, el Pentateuco contiene muy pocos elementos de utilidad para la vida moderna. El cristianismo tampoco es relevante para nuestra sociedad, ni lo es ningún dogma de fe. No lo es ninguna ideología que pregone contra las mujeres, y que llame a la violencia, por un lado, y a la sumisión, por el otro. Y sostengo que esto lo saben incluso los mismos cristianos, quienes, para vivir en sociedad, saben perfectamente qué tomar y qué dejar de los evangelios, pues reconocen, de manera instintiva y automática, qué partes se ajustan a la moral humana, y cuáles no. En este sentido, hasta en los cristianos vemos una moralidad que no surge de la Biblia y según la cual ajustan lo que usan de la Biblia. Quiéraslo o no, en este punto, tu propio comportamiento cívico me da la razón.
En cualquier caso, ¿en serio debemos usar esa lógica? o sea, si la edad de algo dicta su pertinencia, entonces ¿qué hacemos con la homosexualidad?
Estás equiparando aquí chinas con botellas. Y sé que estás de acuerdo conmigo, puesto que más abajo dices: “La homosexualidad es una conducta sexual, el Cristianismo es toda una cosmovisión ¿Es sensato igualar estas dos cosas en los debates?”
“No me malinterpretes, hubiera sido muy valioso ver una visión antagónica a la de José Alberto, eso solo enriquece el debate y nos motiva a todos a encontrar verdad. Pero todo se volvió, parece, una visión antagónica a la existencia de José Alberto. Un rechazo que parece dogmático y airado hacia el dogmatismo que ves en Ortiz.”
Cita textualmente una sola instancia en la que ataqué o antagonicé “la existencia misma de José Alberto”. En mi artículo hice dos cosas; imité los recursos retóricos de Ortiz para “virarle la tortilla”; y acto seguido desmonté sus ideas y su exposición de las mismas. Ninguno de mis argumentos fuead hominem, a menos que estés pensando en ese pasaje en el que dije que Ortiz era un caso perdido (¿no lo es?) Los creyentes suelen cometer esta falacia demasiado frecuentemente. Entienden que atacar la idea que profesan es atacarlos a ellos mismos, y de esta forma buscan proteger la idea pidiendo protección y respeto para sí. Lo siento, amigo mío, pero esa chulería no va conmigo. Si ahora mismo tú me dijeras que la teoría del Big Bang es un soberano disparate, ¿no sería una completa sandez ripostar que me ofendes personalmente y buscar de esa forma desarmar tu aseveración? Ninguna idea, el cristianismo incluido, está por encima del análisis, de la crítica, ni de la risa, que es, en cierto modo, un análisis. Pedir para sus ideas la protección de lo sagrado, para que ni sean analizadas, ni escudriñadas, ni parodiadas, ilustra perfectamente la deshonestidad intelectual fundamental de los creyentes.

Cuando defines el Cristianismo como “la ideología de pastores de cabras que habitaron los desiertos del Medio Oriente en la Edad de Bronce” creo que entiendo tu indignación; si el cristianismo fuera eso yo no me aventuraría a escribir estas breves líneas, y sobre todo, algo así fuera hoy material de museo o un antiguo patrimonio intangible perdido hace milenios.
El cristianismo tampoco es relevante para nuestra sociedad, ni lo es ningún dogma de fe. No lo es ninguna ideología que pregone contra las mujeres, y que llame a la violencia, por un lado, y a la sumisión, por el otro. Y sostengo que esto lo saben incluso los mismos cristianos, quienes, para vivir en sociedad, saben perfectamente qué tomar y qué dejar de los evangelio
Vuelves a utilizar palabras que no están en mi ensayo. Estoy empezando a creer que lo haces a propósito. Lee otra vez. La ideología que defino aquí es la que utiliza Ortiz para su catilinaria, salida del Pentateuco. Siendo esto así, ¿exactamente qué parte de esta aseveración es falsa? ¿Pastoreaban o no pastoreaban cabras los autores de esos libros? ¿Vivían o no vivían en los desiertos y oasis del Medio Oriente? ¿Pertenecían o no pertenecían a la edad del bronce? Que no te guste como suena no quiere decir que sea falso.
Los diferentes renacimientos científicos y culturales desde Carlo Magno hasta el mismo Renacimiento Italiano fueron emprendimientos cristianos, el concepto de la educación de las masas también.
Y en el mundo árabe, todos los diferentes renacimientos científicos y culturales fueron emprendimientos islámicos. ¿Acaso tenían alguna otra opción? En sociedades en la que se persigue la heterodoxia obviamente todo lo que sucede debe suceder dentro de la ortodoxia. Que algo suceda en el contexto del cristianismo no quiere decir que sea cristiano odel cristianismo. Eso es una falsa equivalencia… Y sin embargo, discrepo. Todo los grandes renacimientos culturales y científicos se han dado a pesar del cristianismo y a riesgo de la hoguera, excepto, quizá, durante el Renacimiento europeo, y solo porque la iglesia relajó su vigilancia y su persecución. No veo cómo puedas estar en desacuerdo con esto.
¿Por qué presentar la mera sexualidad de alguien como un mérito que lo hace héroe? ¿Eso es sensato? ¿Reducir las causas del éxito de Alejandro Magno, Da Vinci, Miguel Ángel, Whitman a la homosexualidad que practicaron es algo sensato?
Supongo que derivas esto de aquí: “Contracorriente fueron Miguel Ángel, Leonardo Da Vinci, Alejandro Magno, Alan Turing, Sappho, Tchaikovsky, Walt Whitman y todos aquellos seres humanos de la historia (mejores que tú, que me lees, mejores que yo, que escribo, y ciertamente mejores que José Alberto Ortiz), que desde su homosexualidad han contribuido más a la felicidad del mundo en que vivimos que todos los diseminadores del odio desde su heteronormatividad.” Léelo de nuevo, y dime tú mismo si lo que estoy haciendo es presentando “la mera sexualidad de alguien como un mérito que lo hace héroe”. Entendería tu acusación si hubiera dicho “que por su homosexualidad han contribuido…” Pero este no es el caso, y tu lectura es caprichosa.
Debo decir que tengo la meta y la orden de, diariamente, respetar y amar a todo el mundo.
Yo tengo la misma meta, pero no me lo ordena un ser imaginario, sino la razón. Se puede ser bueno y moral sin ser teísta, Jesús, y aquí sí afirmar lo contrario ofende a los millones de seres humanos que son buenos sin creer en tu dios ni en ningún dios, pues los relegas al vertedero de la moralidad sencillamente porque no profesan tu fe. No te maravilles de que se pueda ser bueno sin un dios, sino que tenle compasión (y un poco de miedo) a quienes necesitan un dios para ser buenos.
Cuando nos veamos en la silla patética de Maximilien Roberspierre durante la Revolución Francesa, inventando un cascarón de religión al vapor para cubrir el vacío dejado en la gente cuando les pedimos que crean que no hay Dios, para apaciguar las orgías de anarquía que surgen cuando ya nadie tiene porqué perseguir hacer el bien de la totalidad de los individuos 24/7.
¿Qué tal si en lugar de adoctrinar a las personas con mitología y magia, los educáramos? No veo que Suecia ni Dinamarca ni Noruega ni ninguna otra sociedad predominantemente atea esté sumida en el caos anárquico que mencionas. Sí veo en esas sociedades ciudadanos altamente educados y bajos índices de criminalidad y corrupción. El caos y el reperpero que describes lo veo más en sociedades muy religiosas o teocráticas. Lo siento, pero estás entendiendo el asunto completamente al revés. Es la religión la causante de la división y el caos y la guerra, y no creo que tenga que citar fuentes para evidenciarlo; ponte a ver las noticias o lee cualquier libro de historia. No puede ser de otra forma, puesto que el pensamiento irracional genera comportamientos irracionales. Es más fácil para un creyente que para un ateo romper la ley o ser violento, puesto que su estándar moral emana de un ser imaginario que puede ser utilizado para justificar lo que sea sin tener ninguna necesidad de mostrar evidencia. Solo necesita fe en que eso es lo que quiere su dios. Ningún ateo está matando a nadie en nombre del ateísmo. Abundan los estudios en los que famosamente los ateos salimos mejor parados en cuestiones de moralidad que los creyentes. Por eso, contrario a ti, entiendo que este mundo solo conocerá la paz cuando se libere de las cadenas de la religión.
Por otro lado, los invito a buscar en los textos bíblicos cristianos cuales son las enseñanzas que justifican los asesinatos a personas ilustres solo porque no piensan igual, o que justifican las Cruzadas, la Inquisición, las Guerras de la Religión entre Francia, Inglaterra y España, la pedofilia, el afán por dinero o poder de muchos líderes evangélicos y todas las demás locuras hechas en nombre del Cristianismo. Se darían cuenta de que el Cristianismo condena todo eso, y que los individuos que hacen estas cosas desde las iglesias lo hacen en contra de sus fundamentos, si es que realmente son cristianos.
Es una deshonestidad intelectual rescatar para el cristianismo los aciertos y los desaciertos achacárselos a otra cosa. Esta es una falacia que no puedo dejarte pasar. De ser así, yo estaría en mi derecho de achacarles los aciertos a otra variable, y endilgarle los desaciertos únicamente al cristianismo.
Podemos ampliar estas cosas y hablar muchas otras luego, ya debo cerrar por razones de agenda. Más adelante, cuando tenga un poco de tiempo para hacerlo, me gustaría contribuir al debate sobre la homosexualidad, ya no comentando tu artículo. Finalmente, fíjate que no cuestiono tus críticas al contenido de los escritos de José Alberto, más bien preocupan algunos de los complementos y deducciones que presentas como ya te lo mencioné antes por aquí. Igual voy a leer los artículos de él que señalas.
Me parece, Jesús, que esto es lo primero que debiste haber hecho: leer los artículos a los que me referí… y acto seguido comportarte como un buen cristiano, seguir tu mandato de “diariamente, respetar y amar a todo el mundo”, y salir a dar la cara por un grupo oprimido respondiéndole tú a José Alberto Ortiz. Si no quieres que se encargue un ateo de lo que debería estar encargándose un cristiano, prioriza… porque veo que no perdiste mucho tiempo escribiendo un artículo para responderme a mí, defendiendo rápidamente el formato de tu doctrina en lugar de ponerla en práctica. No por nada dijo San Pablo que la letra mata, pero el espíritu vivifica. Atiende más el espíritu, que no la letra. No te preocupes tanto de lo que pueda pensar o dejar de pensar de la fe que profesas un ateo, y sí preocúpate de lo que piensa o deja de pensar la gente que profesa tu fe, muchos de quienes, en nombre de Jesús, predican la deshumanización, la persecución y la intolerancia.
Para terminar, es interesante observar que mi ensayo no es sobre el cristianismo ni sobre la historicidad de Jesús. Ni siquiera es sobre ateísmo. Mi ensayo es sobre la intolerancia de un artículo, respaldado por un estudio científico y escrito por un evangélico. En mi texto incluyo, además, estadísticas reales sobre los pastores evangélicos que descalifican al evangelismo como un agente moralizador relevante en nuestra sociedad. Ambos puntos centrales de mi ensayo, la deshumanización que intenta Ortiz de todos los homosexuales por medio de la ciencia, y las estadísticas que, científicamente, demuestran que el evangelismo está sumamente mal equipado para pronunciarse en asuntos de moralidad,han sido minuciosamente ignorados por absolutamente TODOS los lectores que han pretendido responderme.Y entre ellos te incluyo a ti también. Misteriosamente, los candidatos a refutadores solo se han enfocado en la sorna con que, en el segundo párrafo de mi ensayo, resumo el dogma de la cristiandad en una sola oración para efecto humorístico; el resto del artículo parece no existir. Ninguno ha querido involucrarse conmigo en ese aspecto.  Me parece muy revelador que tantos cristianos hayan decidido encresparse por una simple frase al tiempo que se desentienden del resto del artículo, mucho más relevante para la doctrina que dicen profesar. Imagino que aplica aquí el proverbio que reza: “Mono sabe palo que trepa”. Se han ido por todas las ramas menos por la que tiene la fruta. Es más fácil, supongo, limitarse al área de mi ensayo que puede refutarse porque gloria a Dios, censurarse porque hosanna y descartarse porque aleluya. Lo otro requiere seso. Lo otro requiere admitir falencias. Lo otro requiere examen de conciencia.
Hasta pronto, Jesús. También yo te reconfirmo mi amistad y te agradezco tu ecuánime, erudita, apasionada, si bien ultimadamente equivocada, respuesta. Te quiero, te estimo y te recuerdo; encontrarte por los pasillos de la universidad siempre fue un vaso de agua fresca. Solo por esa razón me he tomado el tiempo de responderte. Cristianos cristianos como tú le dan lustre a lo que rápidamentese convierte en una cofradía de histéricos motivados por el prejuicio y el odio, ciegos a la razón y persistentes en el error, incluso delante de las evidencias. Creo que tu tarea evangelizadora debe empezar entre los propios evangélicos. Ojalá este sea el primero de muchos intercambios.
Un gran abrazo.


sábado, 16 de agosto de 2014

A propósito de la Restauración de la República

Plaza de la Bandera
Por Orbis Beltré - Relacionista público de ATEODOM / Asociación de Ateos Dominicanos

Abatido y destrozado me delato al cielo que nos da la lluvia
no tengo guerras perdidas
pero he quedado sin una ciudad ni un campo de la Quisqueya que de niño había soñado
mi país de ahora es el invento de una sociedad que soporto a penas
Esta gente no merece la bandera más bonita de todas las naciones
ni el escudo con las Santas Escrituras
ni la palma ni el laurel
ni la cinta con Dios Patria y Libertad
Esta gente ridiculizó el emblema que le dio su origen
envileció el esfuerzo inmaculado de los hombres y mujeres que todo lo dieron por la libertad
y ante el sol de cada día dominicano crece inmune la atropellante esfinge del sálvese quien pueda
Hace tiempo que el himno de Prudhome y de Reyes se irrespeta 
y hace más aun que no nos damos cuenta
y es que no sabemos cuán enfermos estamos 
si el AMOR al ejemplo de honradez de Duarte no trasciende del bronce o del concreto de una estatua por demás sobrevaluada
Es un sacrilegio todo
hemos claudicado en todo lo bueno
no hay moral
no hay dignidad
no hay humanismo
Un ultraje colectivo se ha tornado ley
hasta aquí se han prolongado los infames de nuestro pasado
imponentes como el sol se exhiben
Guacanagarix
Bobadilla
Santana
Buenaventura
Victoria
Heureaux
Trujillo
Balaguer
No los hemos superado porque no murieron
nunca murieron
solo ausentaron su aterradora presencia en los designios de una democracia putrefacta y perversa 
hechora de mentiras
germinadora de injusticia
soporte de maldad y negadora de lo bello
Hasta aquí se han prolongado los aventureros que vinieron 
a robarnos
a abusarnos
a esclavizarnos
a matarnos
Hasta aquí se yergue como invencible la corrupción y el odio
el credo de la cruz asesina
los espejitos malditos que propiciaron engaños
la despiadada usura promotora de muerte
y la insolencia por lo sublime
Oh pueblo mío!
Cuánto pesar me causa saberte indiferente y frustrado 
anclado en la miseria dadora de hambre
marginadora de niños
madre del dolor
arruinadora de hogares 
perjudicial en esencia!

domingo, 10 de agosto de 2014

Desenmascarando al dios bíblico

Orbis Beltré
Por Orbis Beltré 

"¡Ay de la tierra y del mar, porque el diablo ha descendido a ustedes teniendo gran ira!". Apocalipsis 12:12.

Ese grito de victoria exclamado por el arcángel Miguel, anunció la expulsión desde los dominios del cielo, del diablo y de sus seguidores de entre las legiones del dios bíblico. El cielo quedaba así, libre de los problemáticos, de los disidentes, de los desertores, de los rebeldes o simplemente, de los indeseables que amenazaban con hacer sucumbir el gobierno diosita.

De tal manera y de ese modo, los habitantes del cielo limpiaron su casa, se deshicieron de sus “excompañeros” que empezaron a manifestarse en contra del dios supremo.

Suponiendo que todo esto sea cierto, estamos hablando del acontecimiento más nefasto en perjuicio del ser humano, y de la más perversa acción que a dios alguno se le podría ocurrir. Es un dios que, no importándole la suerte de quienes somos más débiles que él y que los suyos incluidos los desertores, resuelve solucionar su problema, su lío allá arriba, ensuciando nuestra casa.

El diablo y sus seguidores fueron “degradados” en la casa del Señor, y como allí ya no se halló lugar para ellos, el mismo dios que dicen los diositas que nos ama, los lanzó hacia la tierra, hacia nuestra morada, hacia nosotros.

No fue capaz ese dios de enfrentarse a esos seres de su ingenio en duelo de morir o vencer. Lo que hace es simplemente expulsarlos, y no a otra galaxia u otro planeta, sino a la tierra. De paso y además, se le olvida en su “misericordia”, su “benevolencia” y su “respeto” hacia nuestra libertad, preguntarnos si estábamos de acuerdo con acoger en nuestro planeta su deshecho celestial. ¡Cara dura el tipo!

Tras esto, ningún líder de la posteridad seria más irresponsable, abusador, indolente, malintencionado, egoísta y cobarde que él, que ese dios bíblico.

Las consecuencias fatales de esta despreciable actitud no tardarían en aflorar. El inocente, incauto e indefenso ser humano representado en el mito Adán/Eva, desprovisto de la necesaria sapiencia para lidiar con situación tan delicada, pronto fue presa fácil ante quien llegó cargado de cólera y descontento con dios, dispuesto a causar aquí en la tierra, un daño mayor al que pudo haber causado en el cielo.

Así tal cual fue, Eva primero y después Adán. Ambos cayeron víctimas del descaro de un dios que les legó su verdugo; verdugo que en todo caso, según se deduce de la Biblia, no es más que un amiguito de dios, para éste, o sea el mismo dios bíblico, en una descomunal orgía de cinismo, ejecutar impunemente su macabro plan contra esta pareja que allí estaba tranquila.

La “serpiente” pues, habló a Eva con la verdad. Comiendo el fruto del árbol del conocimiento del bien y del mal, aprendimos esas dos dimensiones y llegamos a ser como dioses. Eso fue lo que habló la “serpiente” a Eva que sucedería. Génesis 3: 4-5.

En Génesis 3: 22-23-24, dios mismo lo admite, reivindicando así a su compañero el diablo. Ahí el dios bíblico se dirige a Eva y Adán diciéndoles, cito: “Han llegado a ser como dioses al conocer lo bueno y lo malo”.

Y en cuanto a que morimos, éstos es, no porque comimos los frutos del árbol del conocimiento de lo bueno y de lo malo, sino porque ese dios de quien dicen los diositas que nos da libertad para que hagamos lo que queramos, nos permitió comer los frutos de un primer árbol pero, asimismo nos retiró a empujones de las proximidades del árbol de los frutos de la vida eterna, para prohibirnos comer de los mismos y evitar que podamos vivir indefinidamente. ¡Tremendo teatro! ¡Pobrecitos Adán y Eva! ¡Pobrecita la humanidad!

Pero el cinismo de ese dios parece imperecedero y sigue obrando. En un acto estúpido, aberrante y vergonzoso, se pronuncia castigando a la serpiente, a Eva y a Adán, pero no castiga jamás al diablo. Hasta maldice el suelo y parece hallar complacencia en decirle a Adán que con dolor comerá su producto todos los días de su vida. A la pobre Eva le promete multiplicar sus dolores de parto, y la degrada como ser humano al sentenciarla con "tu único deseo vehemente será tu esposo, y él te dominará". Génesis 3:16.

¿Conoce el futuro el dios bíblico?

Fíjense cómo son Eva y Adán vejados, burlados y maltratados sin que fueran culpables de alguna desgracia, sin que fueran merecedores de reprimendas. Se trata de un dios maquinador, trepador, revanchista ensoberbecido, enfermo de arrogancia y despiadado en extremo; se sitúa por encima de la razón para satisfacer su vanidad; vanidad que la cultiva hasta volverse un despreciable psicópata, porque sobre todo procura en toda circunstancia mantener a salvo, libre y en constante actividad, a su “contraparte” el diablo. 

Al dios bíblico le es grato mantenerse haciendo comedia y conspirando contra la humanidad, algo que al parecer no podría hacer sin un vago y sinvergüenza que se muestra dispuesto a complacerlo en su complejo de sentirse víctima y héroe a la vez.

Este relajo, por ejemplo, alcanza su cúspide en el diluvio bíblico. Veamos por qué: si la causa que motivó al dios bíblico a destruir el mundo fue la maldad que había entre los habitantes de la tierra; si el objetivo era acabar con la maldad; si la maldad se derivó del pecado; si el pecado llegó al ser humano por éste desobedecer; y si quien instó, convenció u obligó  al ser humano a desobedecer al dios bíblico, fue el diablo, pues el primero que en dicho diluvio debió perecer ahogado se supone que tenía que ser el diablo.

¡Pues no! Todo indica que el diablo ni siquiera se mojó, y me imagino lo mucho que estuvo gozando en algún lugar del universo, mientras comprobaba cómo su compañero de comedia le complacía una vez más su deseo de observar sufrimiento, destrucción y muerte.

El diluvio bíblico es un episodio más de la eterna comedia en la cual el dios bíblico siempre actúa castigando a la victima pero no al victimario, su colega, su protegido, en quien se justifica, el diablo.

Las presentaciones de estos dos terroristas comediantes no se detendrían en aquellos tiempos. Sodoma y Gomorra serían el siguiente teatro para abusarnos, para incluso matar a personas inocentes, como ocurrió con la esposa de Lot.

Ante todas estas acciones que evidencian un dios envilecido hasta los tuétanos, pretenden los diositas convencernos de que los que fallaron fueron Eva y Adán, y de que es por su equivocación que nosotros hoy estamos sufriendo todas las posibles miserias humanas.

¡Así no es! No es como han pretendido enseñarnos los diositas. De existir ese dios bíblico y de ser la Biblia su palabra, los seres humanos no hemos sido más que victimas de él y de su testaferro y compañero el diablo. Ellos dos son los únicos responsables de nuestras desgracias; ellos dos viven de nuestro sufrimiento, son nuestros enemigos más peligrosos.

Espero con ansiedad el famoso día del juicio final al cual se presentará este perverso dios como juez para juzgarnos. Espero ese día, porque seremos nosotros, los seres humanos, quienes lo emplazaremos a él y a su ángel el diablo, para que respondan por todos los asesinatos y crímenes que en asociación de malhechores ellos consumaron en perjuicio de la humanidad.

Sé que los extirparemos de nuestras conciencias y que los desapareceremos para siempre del universo. Entonces tendremos una moral sin dogmas, seremos seres correctos, a cambio sólo de que de uno sea la bondad de los demás y viceversa.

Mientras tanto, el ser humano debe sentirse obligado a entenderse y comprenderse, a defenderse entre sí, a protegerse entre sí en todo momento, a respetarse mutuamente. Debe el ser humano aprender a generar riquezas sin que implique esto dañar nuestro planeta ni dañarnos a nosotros mismos; debe el ser humano aprender a distribuir las riquezas equitativamente, según la necesidad de cada ciudadano. Así es como llegaremos a vivir bien y alejados de toda amenaza; así es como lograremos la paz y la prosperidad; así incluso podremos vencer la vejez y muerte, hallar más hábitat en el universo y eternizarnos en el tiempo y el espacio, por los siglos de los siglos.