lunes, 7 de abril de 2014

Quid est veritas / Qué es la verdad?

Carlos Márquez
"¿Cuál es el uso práctico de toda esta cuestión? Bueno, sabemos que la verdad concuerda con los hechos, pero la probabilidad es relativa a la evidencia disponible".

Por Carlos Márquez 
Colaborador de ATEODOM / Asociación de Ateos Dominicanos.

¿Qué es la verdad? -pregunta Pilato- mas no espera por respuesta, a sabiendas -quizá-  de que no hay respuesta. 

Se habla mucho de la verdad: que es “hija de Dios”, “inmutable”, “no pierde batalla contra la falsedad”, “la verdad nos hace libres”, “cuando se dice la verdad hasta el Diablo se avergüenza”, y más…


El hombre, es decir la humanidad -de carne y hueso- se haya en combate abierto con “la verdad”, y el resultado oficial no llega aun. Unos dicen que la verdad es absoluta, otros que la verdad es relativa. Los escépticos niegan la posibilidad de alcanzar la verdad. Los empíricos nos dicen que la ciencia nos puede dar un conocimiento fidedigno y se muestran escépticos respecto a “verdades divinas”. Otros hasta dudan de sus sentidos y la evidencia que los mismos amasan.
Quizá la verdad más prosaica, llamémosla -factual- sea la verdad de los hechos. Así que de una manera inelegante permítame definir la verdad. 
¿Qué quiero decir-cuando decimos- cuando se declara-y declaramos- algo como verdadero? Pues estamos diciendo que una declaración “X” está en acuerdo o corresponde a los hechos. Por ejemplo cuando digo: El término  presidencial de John F. Kennedy fue entre Enero 20 de 1961 hasta Noviembre 22 de 1963. Esto es cierto porque corresponde con los hechos, así como un mapa fehaciente reseña una topografía con sus valles, ciudades y montañas, tal y como existen en la realidad que todos vivimos. Entonces ese mapa es un mapa “verdadero” por su concordancia con lo real. 
Era Verdad antes, pero ahora…
Consideren un Mapamundi impreso en 1492, y vemos que no contiene Norte y Suramérica etc. Los cartógrafos de aquel entonces entendían su Mapamundi como verdadero y en concordancia con la realidad.  Estos delineantes del 1492 desconocían de la auténtica topografía del mundo ya  que algunos de los continentes y demás Terra Incógnita estaban por descubrirse aún. Hasta criaturas mitológicas que habitaban en el más allá ("Plus Ultra") de las columnas de Hércules en el Estrecho de Gibraltar (con su inscripción “Non Plus Ultra”-No más allá-), entonces el mapa es congruente con la ignorancia de aquel tiempo. ¿Verdad una vez y falsedad en otro tiempo?
Figure 1 Mapa Mundi a partir de la Geographia de Ptolomeo. Copia de Johannes de Armsshein, Ulm, en 1482.

Cuando decimos que la verdad “cambia” y que la verdad de una época es falsedad en otra, y lo que es cierto para una cultura no es cierto en otra, lo que estamos queriendo decir es que las creencias en referencia a la verdad están sujetas a mutación. Y si esto es así, ¿qué tal con los arquetipos de hoy en día? ¿No están estos paradigmas del presente igualmente  sujetos a la misma metamorfosis? ¿Cómo entonces podemos afirmar que conocemos la verdad sobre “X” cosa?


Figure 2 Mapamundi Actualizad



El lenguaje es la casa de la verdad


La vedad, la lógica y el lenguaje...
El lenguaje-cualquier lenguaje- acaece de una manera crucial en el desarrollo de la civilización y cultura humana. Emana de nuestra adaptación biológica, y el lenguaje es favorecido por la selección natural, por sus numerosas ventajas para la humanidad.
En el intervalo del renglón cotidiano el lenguaje actúa como herramienta extremadamente útil, -es imprescindible-. Pero como todo arreglo biológico también tiene sus límites (alas son inútiles para excavar y necesarias para volar, ojos inútiles donde no hay luz y útiles donde hay luz).-El brazo llega hasta donde alcanza-.
El lenguaje se encuentra con dificultades cuando trata de describir cosas que están más allá de nuestra experiencia.
Como por ejemplo: “El Ser Inmóvil y Eterno”-bueno- Yo personalmente nunca he visto al tal “Ser” Y tampoco lo he visto moverse o quedarse quieto, o sonriendo. Aunque a priori  el enunciado sea lógico, no es equivalente a decir que “todo triangulo tiene tres lados”. 
“El Ser Inmóvil y Eterno”  parece estar gramaticalmente correcto en una estructura sujeto-predicado. “Ser” -sujeto-, “Inmóvil y Eterno”-predicado-. Pero sucede que “Ser” es un verbo;  se comete la falacia de reificación  (Lat. “res”cosa-“facere”-hacer-) por la cual se atribuyen características concretas a algo que es abstracto, como por ejemplo, “la sabiduría,” “la naturaleza” y demás. Muy admirable cuando su inercia es poética, pero cuando se utiliza como parte de un argumento de lógica, es una falacia. O tal como la falacia patética, la cual atribuye sentimientos (pathos) y cualidades humanas a lo inanimado. Ejemplo: "el objeto en movimiento, debido a su masa, quiere seguir moviéndose". 
Una masa inanimada no tiene deseos. También existe un sistema de creencias que sostiene que todas las cosas contienen un espíritu que motivan y dirigen sus acciones, y ese sistema es llamado "animismo" (espíritus que ocupan y animan a cosas en el mundo natural, como las rocas y el aire). Por tanto “El Ser Inmóvil y Eterno” carece de sentido, no es una preposición lógica, es una pseudoproposición. La disolución de este “pseudoproblema” es mediante un análisis del lenguaje, con ayuda de la lógica. Y concluiríamos que no nos estamos refiriendo a cuestiones de hecho, sino que estamos haciendo mal uso del lenguaje. En el lenguaje cotidiano no tematizan distinciones de sintaxis o reglas que limiten preposiciones-objeto sin distinguirlas con precisión, sino tratándolas por igual y por ello aparecen las antinomias, como también el lenguaje del pseudo-objeto sobre el cual nos advirtió Carnap. Cual ilusión óptica las pseudo-preposiciones parecen referirse a objetos o hechos en el mundo pero no es así. 

 
  
La verdad es evidente y necesaria, sin embargo, ¿sería correcto decir que si toda conciencia desapareciese ya no habría verdad? Esto suena contradictorio y sin sentido, ¿no? Y en este caso es por perder el compás a la definición de la verdad. Verdad (elegantemente dicho) es la realidad conceptualizada con precisión utilizando lenguaje. La verdad aplica a las afirmaciones, una declaración que corresponde con la realidad es verdadera, una declaración que no corresponde con la realidad es falsa. La verdad es un concepto no una entidad, la verdad trata de entidades. Y como tal, si toda conciencia desapareciese, entonces también desaparecería la verdad, pero no la realidad. Por ejemplo,

La Ley de Identidad: A es A, un árbol es un árbol; si algo existe tiene su naturaleza característica. Un libro tiene portada, contraportada y páginas en su interior. Un automóvil tiene cuatro ruedas, asientos, puertas, vidrios, etc.
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Reconocemos lo que algo es por sus características. Aún más, si algo tiene una identidad, no puede tener otra, ya que ésta es única e individual.  En otras palabras: si algo existe cuenta con una serie de atributos que son consistentes consigo mismo.  Este algo no tiene un conjunto de atributos que sean inconsistentes consigo mismo.  Por lo tanto, podemos fácilmente concluir, que un chivo no es un paracaídas.  Una jagua no es un automóvil de carreras, y un árbol no es una película.
Pues hasta la famosa Ley de Identidad desaparece cuando desaparece su casa-la conciencia- que utiliza lenguaje para capacitarla.
Sin embargo el hecho de la identidad -a lo que la ley se refiere- no desaparece. Lo mismo aplica a la verdad y la realidad(a la que hacen referencia las declaraciones verdaderas).
Siendo el caso en el cual es obligatorio utilizar el lenguaje para comunicarnos sobre cosas en las cuales no existe lenguaje, mente o comunicación, es fácil ver como esto conlleva al tropiezo.
De hecho el lenguaje deteriora cuando comenzamos a abordar el tema de la mecánica cuántica. Tradicionalmente el lenguaje juega un papel pasivo cual solo vehículo de carga, llevando información de un punto α a un punto Ω. Expresar una idea nueva era pues buscar esa elusiva “expresión correcta”. Tal actitud es una extensión de la presuposición común de que la función esencial del lenguaje es la de transportar un cargamento que es tan diverso en su descripción como en su significado y contenido.
Fue Niels Bohr quien objetó que las palabras como la posición, el momentum, el giro, el espacio y el tiempo, refieren a los conceptos clásicos que no tienen cabida dentro de la teoría cuántica. Einstein por su parte, argumentó que debería ser posible desarrollar nuevos conceptos que son más adecuados para el dominio cuántico. Sin embargo Bohr sostuvo que, dado que nuestro lenguaje por su propia naturaleza, se basa en nuestro día a día al comercio etc., con el mundo a gran escala no será posible modificar o cambiar de ninguna el mismo de manera significativa. En otras palabras, una discusión inequívoca sólo es posible al nivel clásico de las cosas, es decir, cuando se trata de los resultados de las mediciones cuánticas hechas con aparato a escala de laboratorio. Pero pedir lo que realmente sucede en el nivel cuántico de las cosas, no tiene sentido.




 
Los variantes significados de las palabras también se pueden contactar en los términos que tienen que ver con las relaciones espaciales, tales como el espacio, la posición, la localidad, la no localidad e incluso interacciones. Las mismas han sufrido cambios mayores en los acontecimientos que se sucedieron de Aristóteles a Newton y, finalmente, a la imagen mecánica relativista y cuántica general de las cosas. Sin embargo, debido a que la misma palabra "espacio" se utiliza en cada caso, es posible crear la ilusión de que diferentes científicos, a veces hablan de lo mismo. 
Dificultades especiales también se pueden encontrar en las discusiones sobre el significado del teorema de Bell, y el significado de la no localidad en la física. Por supuesto, los físicos entienden perfectamente la diferencia entre la teoría cuántica, la relatividad y la mecánica de Newton. Sin embargo, hay muchas diferencias sutiles en particular significados asociados a una palabra como el espacio, y es a menudo el caso de que los viejos y nuevos significados coexisten uno al lado del lado. Quiere esto decir que, los científicos pueden emplear la misma palabra en sutilmente diferentes maneras dentro de la misma conversación. A nosotros nos atañe -en nuestro marco de referencia- utilizar el lenguaje para comunícarnos; estando consientes tanto al poder, como a las limitaciones mismas del lenguaje. El lenguaje no es un calco de la realidad.
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Las contradicciones lógicas son resultado del lenguaje, no tiene nada que ver con lo real, y no puede tener nada que ver con la realidad.
De hecho, conceptos que incluyan contradicciones de lógica solamente existen en el mundo del lenguaje. Ni siquiera o apenas podemos concebir tales conceptos, como “Un ser que no existe” lo cual viola La ley de No Contradicción: una declaración no puede ser al mismo tiempo tanto verdadero como falso y del mismo modo. Si le dijese: “Ayer fui al malecón a comprar helado de coco”, y más tarde le afirmo que:“Ayer no fui al malecón a comprar helado de coco”, usted me corregiría diciéndome que existe una contradicción.  
Una contradicción ocurre cuando una declaración excluye la posibilidad de otra y aun ambas afirman ser verdaderas.  Ya que sabemos que ambas no pueden ser verdad, vemos entonces, una contradicción.  Basados en este principio podemos concluir, que la verdad no se contradice a sí misma. “Un ser que no existe” es una contradicción, pero el ser humano cambia y añade en pos de remover la objeción. La explicación es algo así dizque: “Existe”-ese ser- pero “fuera” de esta realidad, de este mundo. Ese “ser” no existe en este mundo como tú y yo existimos porque su existencia es incorpórea. En alemán esto se llama Sprachspiel (un juego de palabras que pretende poner el círculo dentro del cuadrado). “Un ser que no existe” es claro, pero no hace sentido, es sprachspiel.
 O sea, ¿qué significa “X” es posible? “X” es posible si “X” es válido y coherente.
La realidad no consiste de palabras, las mismas se usan para describir la realidad, y no siempre son adecuadas o tienen resultados ciertos y exactos.
Así que ademas de tan solo proclamaciones “verdaderas”, ¿hay alguna otra manera de entender el porque las entidades lógicas contradictorias no pueden existir? Existe respuesta una vez que se entienda que los conceptos de lógica contradictoria son “realmente” nada en absoluto.
Veritas, Probabilitas et Incertum

La “verdad absoluta” (la verdad no usa adjetivos) es ficción, si se obtuviese no hubiese necesidad de preguntar nada más. Para llegar al clímax de todas las “verdades” se requiere una conjunción total de lo que sabemos y de lo que sabemos que no sabemos, más lo totalmente desconocido por la humanidad (utópico). La verdad como negocio con la moral absoluta    
 Aunque “la verdad” no pueda ser alcanzada la ciencia se acerca más y más a altos índices de probabilidad de certeza. 
K. Popper introduce el término de verosimilitud; es un concepto metodológico para expresar el grado de verdad que puede tener una hipótesis científica ya que -como dicho anteriormente- la verdad es una meta inalcanzable para la ciencia, o no es precisamente su meta más importante, sino una “aproximación a la verdad” que se identifica con el contenido informativo de tal o cual hipótesis o teoría. También K Popper nos ofrece la herramienta de la falibilidad (todos los cisnes son blancos hasta que aparezca uno negro).
Y aquí detenemos el tren –para hablar – del concepto de la probabilidad.
Probabilitas: < “probare”-verbo- comprobar>, < “bilis”-sufijo –posibilidad>, <”tat”-sufijo indica una cualidad>
Con el origen en el latín “probabilitas”-probabilidad- es una palabra que nos permite resaltar la característica de lo probable, es decir, de que algo pueda ocurrir y resulte verosímil. La misma se encarga y nos permite la medida de la frecuencia con la que no es posible obtener un cierto resultado en el marco de referencia de un proceso aleatorio.
La humanidad tuvo -y tiene- interés de cuantificar la probabilidad porque tal cuantificación contribuye a producir acontecimientos a corto y a largo plazo, y aplaca la disonancia cognitiva. Tal como todos los martes por los pasados tres meses se cortó la luz, existe entonces una probabilidad -no por esto una certeza- de que el próximo martes se realice el corte.
Un científico está en pos de la verdad con las consiguientes dificultades que tal búsqueda involucra. El científico piensa en alcanzar la verdad real e indiscutible, de una manera quijotesca, pero Sancho le pone los pies en la tierra porque no hay certeza absoluta. Ninguna afirmación científica está exenta de documentación comprobatoria, mas no hay evidencia definitiva.


Probabilidad Clásica (Laplace)
Una de las características de un experimento aleatorio es que no se sabe qué resultado particular se obtendrá al realizarlo. Es decir, si “A” es un suceso asociado con un experimento aleatorio, no podemos indicar con certeza si “A” ocurrirá o no en una prueba en particular. Por lo tanto, puede ser importante tratar de asociar un número al suceso “A” que mida la probabilidad de que el suceso ocurra. Este número es el que llamaremos P(A).
Si un suceso puede ocurrir de “N” maneras mutuamente excluyentes e igualmente probables,  y “M” de ellas poseen una característica “A”


   Ejemplo 1: P(de que salgan dos veces caras al tirar 2 monedas)



Ejemplo 2: P(de que salga una cara al tirar 2 monedas )
Vemos que esta definición clásica del matemático Laplace  es de uso limitado puesto que descansa sobre la base de las siguientes dos condiciones:
  1. *El espacio “N” o número de casos posibles es finito.

  2. *Los resultados del espacio muestra deben ser igualmente probables.


Este es pues el enfoque clásico “a priori” que se emplea cuando las muestras son finitas y tienen resultados igualmente probables.
Probabilidad Empírica

Quiero llegar a la probabilidad empírica; la definición empírica "a posteriori", se basa en la frecuencia relativa de ocurrencia de un evento con respecto a un gran número de ensayos repetidos.     
Es decir, la probabilidad frecuencial (empírica) se obtiene cuando se experimenta un gran número de veces el mismo fenómeno en condiciones semejantes.
Tal que:
La siguiente tabla nos muestra el resultado de tres equipos para obtener cara y la probabilidad frecuencial de cada serie de tirada.
Si lanzamos una moneda dos veces y la primera vez cae cruz y la segunda, cara, podríamos asumir que la probabilidad de que la moneda pueda caer de cara, es del 1 por dos. Sin embargo, esta es una forma muy básica de probabilidad empírica y tiene un alto riesgo de ser incorrecta porque sólo se han observado dos eventos (caída de monedas). Si se hubiese lanzado la moneda 100 veces o más, tendríamos una visión más clara de cómo la moneda cae de cara cada vez. Cuantos más datos puedas analizar, más precisa será la estimación.
Hay otros casos de certeza lógica en la que no tratamos con el mundo de la experiencia, sino con el análisis de conceptos. Y podemos estar seguros de que no veremos un cuadrado con cinco lados, y que 2+2=4. Empero esto es solo matemática y conceptos, porque cuando aplicamos los mismos a la realidad, no podemos tener siempre la misma certeza. 2 galones de agua mezclados con 2 galones de alcohol no equivalen a cuatro galones de líquido, debido a los  cambios químicos ocasionados por la mezcla.

El hombre o la mujer de ciencia piensa en términos de probabilidad empírica -algunas creencias se justifican otras no- y esto depende directamente de la evidencia presentada, ya que la misma establece probabilidad. Y se piensa en términos de gradación, es decir, índices de probabilidad. Para clarificar observen este diagrama:



En Esta línea”1” se representa la unidad, o sea, la certeza de que “X” es cierto. “0” nos deja saber ciertamente lo opuesto, o sea, “X” no es cierto. En .50 de la línea (la mitad), señalamos que “X” puede o no ser cierto, ¿pero no sé cuál con certeza?. A .75 indicamos que “X” es muy probable, y mientras más se acerca a la unidad, más incrementa su probabilidad. Al .99 “X” representa una posibilidad abrumadora. Cuando el movimiento es de .50 se dice que la probabilidad de “X” es muy improbable y cuando llegamos a .01 se dice que “X” es tan solo una posibilidad teórica, tomen mis números como granos de sal.
Si estuviésemos seguros de llegar a  la unidad 1 o 0,  sabremos con certeza de que proposición “X” es realmente cierto o falso.  Y parece ser así; yo sé que El Gran Combo nunca ha tocado su música en vivo desde la superficie lunar. Ahora, si me preguntas si yo tome agua con mi almuerzo el miércoles pasado, eso es más allá de la experiencia directa -se basa en la memoria- y la misma nos puede engañar. La memoria va más allá de la experiencia inmediata, pero lo mismo ocurre con cada inferencia de lo observado y lo no observado. Estas generalizaciones científicas y sus predicciones, no solo van más allá  de la experiencia inmediata, sino de toda experiencia pasada de cualquier índole. Lo único que nos queda son-probabilidades- No es seguro que el sol saldrá mañana, puede ocurrir un cataclismo cósmico del cual no estábamos percatados-es posible- pero poco probable.


¿Cuál es el uso práctico de toda esta cuestión? Bueno, sabemos que la verdad concuerda con los hechos, pero la probabilidad es relativa a la evidencia disponible.


Cuando antes decíamos"la tierra es inmóvil”, nos parecía altamente probable en luz de la evidencia disponible en aquel tiempo (hoy esa declaración es falsa); “la tierra gira alrededor de su propio eje”. Esto último no obsatante, antes parecía improbable basado en la evidencia de los sentidos. Hoy sabemos que es cierto.
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Entonces evitemos los extremos, por ambos lados una es una actitud acrítica (o acrítica selectiva); el otro demasiado escéptico que se niega a creer -o dejar de creer- a pesar de buena evidencia.
A veces la gente ve las cosas de un modo diferente dentro de lo razonable. No se quiere decir por esto que todo es cuestión de "opinión"; esto es  una forma de escepticismo que niega tanto la posibilidad del conocimiento, por un lado, y de la ignorancia por el otro. Todos tenemos opinión propia pero no hechos propios.
A menos de que una persona sea intelectualmente irresponsable, está siempre en el deber de indagar acerca de la verdad o la probabilidad de sus opiniones. Un comentario irresponsable vestido de opinión es imprudente. Debemos examinar la evidencia antes de hablar.
Les dejo con un sprachspiele
La verdad absoluta es una mentira relativa, la mentira absoluta es una gran verdad. La verdad absoluta no existe y eso es algo absolutamente cierto.