Orbis Beltré |
Amigas
y amigos, ateas y ateos de República Dominicana y del mundo.
Quiero que sepan que la única verdad que una persona
atea puede estar segura de tener, es que la religión está sustentada en mitos,
mismos que ni siquiera somos los ateos y ateas quienes los advertimos, sino, en
el caso del cristianismo, por ejemplo, su libro al que llaman Biblia.
Si alguna vez se han sentido desplazados,
marginados/as por haber asumido esta "forma de ver el mundo y la
vida", es muy importante que entiendan y que comprendan, que nunca se
podrá tener mejor apoyo moral que el de la historia, y la historia está a favor
nuestro en esta necesidad imperiosa de un ser humano por el ser humano.
Asumo que si son ateos/as es porque ya han hecho una o
varias lecturas comprensivas de la Biblia, y porque por lo menos conocen la
historia del cristianismo. En tanto, si no es el caso, los y las exhorto a que
no se consideren ateos/as, no al menos públicamente.
Ser ateo/a significa tener demasiados argumentos
razonables para rebatir cualquier idealismo. Tener argumentos razonables
significa decir algo que tú puedes demostrar. Ejemplo: al estrellarse un huevo
contra una piedra, el huevo es el que se parte y no la piedra.
Muy importante: el ateísmo no es una doctrina ni otra
forma de religión. De manera que, los/as ateos/as evitamos cualquier
manifestación de cualquier naturaleza que atente contra la dignidad del ser
humano, sin importar su credo, orientación sexual, estatus social, color de
piel, apariencia física, condición de salud, o prontuario criminal.
Debe ser una conducta distintiva del ateo y de la
atea, defender siempre los principios de justicia; que nunca se haga más de lo
que la ley manda, pero que toda ley tenga por objeto, la defensa de la dignidad
y la vida de la persona.
El ateísmo no es para juzgar al ser humano. No es para
acusarlo ni hacerlo sentir culpable; el ateísmo no es para segregarnos, ni para
presumir que "sabemos" más que los y las demás, ni para hacernos
creer que por ser ateos/as "estamos en la luz" y los demás en las
tinieblas.
Mantengan siempre presente, que el ateísmo no busca
confrontación ni ve como contrarios a quienes piensan diferente.
El ateísmo considera que los seres humanos somos
aliados por naturaleza, y que debemos siempre mantener esa alianza en la meta
de ser equitativos/as; en la meta de preservar nuestro planeta, lo que es igual
a preservarnos a nosotros mismos.
El ateísmo es una filosofía que promueve la unidad del
ser humano en cualquier escenario que no atente contra la paz, contra la
riqueza creada por el hombre y la mujer y la naturaleza.
El ateísmo es una filosofía que promueve la
sensibilidad social, lo cual significa, que el ser humano está obligado a
asumir un comportamiento dirigido a cuidar al ser humano con todos sus medios.
El ateísmo es una filosofía que rechaza toda forma de
violencia; el ateísmo rechaza las armas de fuego, la industria bélica, las
guerras o cualquier conflicto que ponga en peligro la integridad moral y física
de la persona.
El ateísmo rechaza también las peores de todas las
armas: la usura, el agiotísmo, el acaparamiento, y cuanta forma de maldad
pueda practicarse desde el comercio en cualesquiera de sus modalidades.
Quiere decir, que el ateísmo demanda que el ser humano sea solidario, y que
nunca haya excusas para no practicar esta actitud.
Por último, recuerden esto: serán felices en la misma
proporción en que sean capaces de saber qué cosas materiales no necesitan.