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| Queman bandera haitiana |
Por Orbis Beltré /
Relacionista público de la Asociación de Ateos Dominicanos (ATEODOM).
Deducimos que al incendiar la bandera de un país, quienes incurren en esa práctica sugieren que si pudieran lanzar una bomba atómica sobre tal país, lo harían. Quienes incurren en la práctica de incendiar símbolos patrios de otro país, deducimos que sugieren que también serían capaces de convertirse en asesinos tan despiadados, como
aquellos que quemaron Sodoma y Gomorra, Hiroshima y Nagasaki.
Sabemos que nuestra bandera ha sido varias veces incendiada por haitianos;
todas las veces que lo han hecho nos ha dolido demasiado, nos hemos sentido
humillados como cualquier ciudadano/a dominicano/a.
Nuestra indignación sin embargo, nunca debe ser motivo para echarnos al
fango a revolcarnos con quienes nos la provocan.
Hay una máximo del derecho que dice: "No justificarás tu falta en
faltas ajenas". Y hay otra máxima de la sociología que dice: "Ojo por
ojo se deja al mundo ciego".
Albert Einstein, quizás viendo que el ser humano huye a la sensatez a la
que apelan las dos máximas anteriores, cuando fue preguntado sobre cómo pensaba
él que sería la Tercera Guerra Mundial, respondió que no lo sabía, pero que la
Cuarta Guerra Mundial sería con piedras y palos.
Quemar símbolos patrios, del país que sea, está muy mal.
Pedimos disculpas al pueblo haitiano, y reprobamos en los términos más
contundentes, el que jóvenes dominicanos/as hayan incendiado la bandera haitiana.
Nos sentimos muy avergonzados de que durante tan bochornoso y despreciable
acto, se haya entonado además, nuestro himno nacional.
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